El Círculo erótico es un espacio abierto a todas las mujeres que han atravesado el Círculo de Terapia Menstrual y que deseen seguir creando lazos en Tribu. Es un laboratorio ya que en cada encuentro se trabajan vivencias que nos invitan a observar diversos aspectos de nuestra sexualidad: como el cuerpo, la presencia, el placer, el deseo, la creatividad, la vincularidad afectiva, entre otras. 

Es un espacio de plena confianza donde nos compartimos desde la honestidad y la vulnerabilidad. En la intimidad del círculo, realizamos prácticas que nos conectan tanto con nuestro ser interior, como con la esencia de las demás mujeres. Nos convertimos en espejos mutuos para el crecimiento y el aprendizaje de la experiencia vincular. Juntas creamos las narrativas que favorecen la autoaceptación, el amor incondicional, el culto y el reconocimiento a nuestra capacidad creativa y orgásmica, como los principios de una vida libre y erótica.

El círculo es nuestro refugio de amor y contención. El altar es el espacio sagrado que sostiene nuestras prácticas. El cuerpo, la palabra, la meditación, la danza y el canto son las principales medicinas que nos acompañarán a lo largo de este ciclo.